El
3 de junio tendrá lugar en Argentina
una gran manifestación contra la violencia de género llamada
#NiUnaMenos. Una campaña que se ha vuelto
viral, ningún candidatx, políticx, personaje de la farándula queriendo quedar fuera de la fotito con el cartel ad hoc.
Esas manifestaciones de violencia,
típicamente machistas (¿realmente salieron a expresar su furia ante la violencia de género, o porque tocaron a una de "sus" mujeres?), demuestran que no han entendido nada a los mecanismos de la violencia de género, y que extrañamente,
ningún varón (o muy pocos) se hace cargo de una violencia de la que todxs somos responsables.
La gran pregunta es:
¿Cuántos están dispuestos a la revolución estructural que se necesita para luchar realmente contra la violencia de género?
- ¿Cuántos de los que salieron a la calle a prender fuego a la comisaría y a la casa del Secretario de Seguridad "piropean" a las mujeres? ¿Cuántos saben que esto también es violencia de género, y que entre un "piropo" y la muerte de una mujer por ser mujer, hay una diferencia de grado, pero no de naturaleza?
- ¿Cuántos de los que iniciaron los disturbios pensaron, viendo las fotos de Daiana García en shortcito: "Y también, si sale vestida así...", justificando que se viole, se mate y se tire el cuerpo semidesnudo a un descampado de una chica de 19 años que iba a una entrevista de trabajo?
¿Cuántos escribieron comentarios como el que encontré debajo de una nota sobre Daiana García en
La Nación, y que es uno de los tantos comentarios que culpabilizan a la víctima:
"andan desnudas, eso provoca y no me digan que tienen derecho a vestirse como se les canta, si lo tienen !!!!!!!!!!!!!!!!! pero también tienen que bancarse los problemas que eso acarrea"
- ¿Cuántos miran el programa de Marcelo Tinelli y les parece divertido ver culos y tetas de mujeres en la pantalla?
- ¿Cuántos repudiaron el "chiste" de Guillermo Pardini que decía que para tener sexo con una mujer, hay que drogarla?
- ¿Cuántos pensaron que una chica que sale a bailar, como miles y miles de adolescentes y jóvenes en el mundo, se emborracha, llama a un radiotaxi para volver a su casa de manera segura, se duerme en el taxi y es violada, "se lo buscó"?
- ¿Cuántos piensan que el feminismo es lo mismo que el machismo, pero al revés, cuando el feminismo es el único movimiento en tratar de luchar contra la desigualdad y la violencia de género?
- ¿Cuántos piensan que varones y mujeres somos "complementarios"?
- ¿Cuántos consideran que si una mujer se acuesta la primera noche, es una puta, pero si no lo hace, es una histérica?
- ¿Cuántos hacen chistes machistas y difunden estereotipos sobre las mujeres (las mujeres no saben manejar, las mujeres no sirven para dirigir, las mujeres no tienen sentido de la orientación, las mujeres son impredecibles, las mujeres esto, las mujeres aquello)?
- ¿Cuántos piensan que las mujeres no sirven para tal o cual trabajo?
- ¿Cuántos dicen que las mujeres "son la cosa más bella del mundo", sin darse cuenta de que así están tratando a las mujeres como meros objetos, poniéndolas todas en una misma bolsa y encerrándolas en el papel de cosa pasiva destinada a ser mirada y admirada?
- ¿Cuántos se ocupan de sus hijxs en un 50% real, cuántos faltan al trabajo cuando su hijx está enfermx, cuántos lxs llevan al colegio, lxs ayudan a hacer los deberes, les cambian los pañales, les hacen de comer, les lavan la ropa, lxs llevan a fiestas de cumpleaños, van a reuniones de padres?
- ¿Cuántos les dicen a los nenes: "no llores como una chica", y a una chica: "sos la más linda princesa del mundo", limitando los roles de cada unx y participando así en la construcción de identidades de dominantes y sumisas?
- ¿Cuántos creen que para que haya menos violaciones, hay que enseñar a las chicas a no salir, no vestirse de tal manera, no mirar de tal otra, no ir a tales lugares, tener silbatos, etc., y no hacen nada para enseñar a los chicos a respetar un "no"?
- ¿Cuántos habrán dicho o pensado, como aquel violador en potencia en los comentarios de este blog, que si "una mujer va a una orgía y bebe hasta desfallecer", entonces no tiene que quejarse si la violan?
- ¿Cuántos hacen algo realmente para que haya igualdad entre varones y mujeres, para que los varones no sientan que tienen un derecho sobre el cuerpo de las mujeres, cuántos actúan para enseñar a los varones a no violar, a no pegar, a no matar, a respetar un "no" en cualquier circunstancia?
No necesitamos que los varones salgan a la calle a incendiar edificios y a matar a gente. Necesitamos que dejen de ser machistas, que dejen de "piropear", de acosar, de agredir, de discriminar, de ver a las mujeres como objetos sexuales, de sentirse superiores, que dejen de pegar, de violar, de matar.
Y por cierto, esas preguntas son extensibles a muchísimas mujeres también. Entre ellas, ¿cuántas piensan que no necesitan el feminismo, y ahora llevan también el cartel #NiUnaMenos? Cuántas saben que esa campaña la iniciaron precisamente feministas?
Tampoco necesitamos
la hipocresía de los medios, no necesitamos que una
Mirtha Legrand o una
Susana Giménez enseñen sin el más mínimo escrúpulo carteles de #NiUnaMenos, cuando en sus programas fueron capaces, cada una de ellas, de preguntar a una mujer golpeada:
¿qué hiciste para que te pegara?
¿Qué hace falta para que realmente no haya ni una menos?
- Hay que dejar de preguntar cuán corta es la pollera de las chicas violadas.
- Hay que dejar de considerar a las mujeres como objetos sexuales a disposición de la mirada (y no solamente de la mirada) de los varones: dejar de mostrar cuerpos desnudos femeninos en la tele, las publicidades, el cine, para vender cualquier producto, dejar de cosificarlas como lo hacen Tinelli y consortes, dejar de organizar eventos como "la mejor cola del verano", etc. etc.
- Hay que empezar a considerar que un "piropo" es parte de una misma línea de violencia de género que termina en la violación y la muerte (varón que se siente el derecho a acosar a una mujer con consideraciones sobre su cuerpo = varón que se siente el derecho de tocar ese cuerpo = varón que se siente el derecho de someter sexualmente a ese cuerpo).
- Hay que dejar de educar a las niñas con la idea de que son princesitas frágiles y lindas, y a los varones que son soldados viriles, violentos y conquistadores.
- Hay que dejar de considerar que una mujer que tiene una sexualidad libre "se lo busca".
- Hay que dejar de ser cliente de prostitución (y no solamente de esclavas de trata: hay que dejar de considerar que algunas mujeres son agujeros destinados a que los varones se vacíen los testículos).
- Hay que dejar de preguntar a una mujer golpeada: "¿qué hiciste para que te golpee?" o "pero si no lo dejás, ¿no será que en el fondo te gusta que te peguen?"
- Hay que ser un padre responsable, atento, presente, que se ocupe de la educación de sus hijxs desde que nacen hasta que sean mayores de edad, no esconderse detrás del trabajo para dejar toda la responsabilidad de la crianza a la madre.
- Hay que dejar de considerar que un niño que juega a la muñeca será un homosexual (y dejar de considerar que ser homosexual es un drama), en lugar de considerar que esto lo puede ayudar a ser un buen padre.
- Y por supuesto, hay que legalizar el aborto, cuya práctica clandestina también es fuente de violencia contra las mujeres, que mueren por querer tener autonomía sobre su propio cuerpo. #NiUnaMenos también pasa por la legalización del aborto.
Simplemente, sin una modificación de toda una estructura mental machista y patriarcal, dudo mucho de que se pueda luchar contra la violencia de género.
La inmensa mayoría de las personas piensan que "está mal matar a las mujeres", pero no saben, ni quieren saber tampoco, por qué tantas mujeres son violadas y asesinadas, cuál es el mecanismo de la violencia de género y qué es lo que hay que hacer para vencerla.
Sobre todo porque lo que hay que hacer implica un cambio mental tan importante que significa una revolución total para la mayoría de la gente.
Vencer los estereotipos de género, dejar de considerar a las chicas como princesas y a los chicos como soldados,
dejar de pensar que "hombres y mujeres somos complementarios" es una
revolución estructural que la inmensa mayoría de la sociedad, argentina y mundial, no está preparada para dar.
Sin esa revolución estructural, seguirá habiendo jerarquía de género y, por ende, violencia de género. Ningún cartelito de #NiUnaMenos podrá hacer nada al respecto, y la campaña, iniciada con buenas intenciones, sólo será
una manera barata de quedar bien.
Edit del 2 de junio: Preciso que lo que más bronca me da no es que la campaña se haya vuelto popular y viral. Sólo me puedo alegrar por ello y ojalá vaya muchísima gente.
Pero que un Marcelo Tinelli o un Dady Brieva, que son parte del problema, y que fomentan desde hace décadas la violencia simbólica contra las mujeres en sus programas, aparezcan ahora con el cartelito de #NiUnaMenos me da muchísima bronca. ¿Qué hará Tinelli para que no haya ni una menos? ¿Dejará de cosificar a las mujeres? ¿Modificará sus programas machistas? Tengo mis serias dudas al respecto.